El estrés laboral es un problema que afecta a una gran cantidad de personas. Esto viene dado porque las exigencias del trabajo parecen no tener fin y muchas veces se espera que estemos siempre disponibles y productivos. Si a esto le sumamos los problemas personales, la falta de tiempo para descansar y el miedo a no cumplir con lo esperado, es fácil ver por qué tantos trabajadores terminan agotados y sufriendo de estrés.
Personalmente, he vivido esta realidad. Pero además, como psiquiatra especializado en estrés y trabajo (síndrome del trabajador quemado o burnout), he acompañado a muchas personas que han llegado a su límite, por lo que conozco de primera mano el impacto que el estrés puede tener en nuestras vidas. Y déjame decirte algo importante, toma nota de esto: el burnout no aparece de un día para otro, es el resultado de una acumulación de estrés crónico. Una vez que te encuentras en esa situación, es difícil salir sin ayuda.
Por suerte, existen estrategias que pueden ayudarte a reducir el estrés laboral y a prevenir el burnout. En este artículo, quiero compartir contigo algunas de las técnicas que han demostrado ser más eficaces tanto para mí como para las personas a las que acompaño en mi consulta, formaciones y programas. Estas herramientas no sólo te ayudarán a lidiar con el estrés de manera más efectiva, sino que también te permitirán tener una relación más sana y equilibrada con tu trabajo.
Aun así, ten en cuenta que lo más importante es entender que reducir el estrés laboral requiere un enfoque integral. No se trata de encontrar una herramienta o “hack” mágico para gestionar el estrés, el tiempo o las tareas. Hay un trabajo interno necesario que implica conectar contigo mismo, escuchar tu cuerpo y mente, y aprender a poner límites. A lo largo de este artículo, abordaré estas ideas con más profundidad y te proporcionaré consejos prácticos que puedes empezar a implementar hoy mismo.
Recuerda, tu bienestar no tiene precio. Cuidar de ti mismo no solo es esencial para prevenir problemas de salud más graves, sino que también te permitirá rendir mejor en el trabajo y disfrutar más de la vida en general. Vamos a las estrategias más efectivas para reducir el estrés laboral.
Conectar contigo mismo: el primer paso
Lo primero y más importante para reducir el estrés laboral es conectar contigo mismo. Parece simple, pero muchas veces estamos tan ocupados en nuestras tareas diarias que olvidamos preguntarnos cómo nos sentimos. Haz una pausa y dedícate un momento a ti, aunque sea mientras vuelves a casa del trabajo y pregúntate: “¿Cómo me he sentido hoy? ¿Cómo está mi cuerpo?”.
Uno de los métodos que recomiendo a las personas a las que les hago seguimiento a través de mi programa CIMA (enseño cómo quitar el estrés en tiempo récord) es la escritura. Cuando escribes sobre cómo te sientes, todo cobra una dimensión diferente. No se trata solo de pensar en lo que ha pasado, sino de ponerlo por escrito y darle forma. La escritura tiene un poder especial para ayudarnos a ver la realidad con más claridad. Esto nos permite estar más presentes y, a largo plazo, nos ayuda a identificar patrones que generan estrés.
Reducir el estrés laboral requiere hacer un trabajo consciente de autoobservación. Dedicar unos minutos al día a mirar hacia adentro nos permite ser más conscientes de lo que está sucediendo en nuestro cuerpo y en nuestra mente. Cuando eres capaz de notar cómo responde tu cuerpo al estrés, puedes empezar a cuidar mejor de ti mismo. Es una herramienta fundamental que nos ayuda a prevenir el burnout y mejorar nuestra calidad de vida.
La importancia de los límites
Uno de los mayores errores que veo en las personas que sufren de estrés laboral es la incapacidad de poner límites. Nos cuesta decir que no. Pero quizá más importante: nos cuesta comunicar cómo estamos y que necesitaríamos para trabajar mejor. Personalmente, también he pasado por esto: durante muchos años yo mismo fui el peor jefe que jamás había tenido. Aceptaba más responsabilidades de las que podía manejar porque sentía que siempre debía cumplir con todo.
Decir que no es una habilidad que se aprende. Te invito a reflexionar: ¿qué es para ti el éxito? Muchas veces, asumimos que el éxito es estar siempre ocupados o tener grandes logros. Pero, ¿qué pasaría si redefinieras el éxito como la capacidad de disfrutar de cada día con tranquilidad? Para reducir el estrés laboral, es esencial aprender a decir no y priorizar tu bienestar.
Desconectar para volver a conectar
El estrés laboral tiene una particularidad: nos hace olvidar lo que realmente nos gusta hacer en la vida. Muchas personas me dicen que, después de años de estar inmersos en su trabajo, ya no recuerdan qué es lo que les apasionaba fuera de él.
Una de las claves más importantes para reducir el estrés laboral es desconectar del trabajo regularmente. Haz un esfuerzo por reservar tiempo para ti mismo cada día. No tiene que ser un gran evento, a veces algo tan simple como leer un libro, tomar una caminata o disfrutar de una tarde tranquila puede hacer maravillas.
Usa el deporte como herramienta de conexión contigo
Siempre he sido un amante de los deportes de montaña, y he descubierto que el deporte tiene una capacidad especial para reconectar nuestra mente con el presente. Al practicar deportes, ya sea correr, hacer yoga o simplemente caminar, podemos entrenar nuestra atención. El movimiento físico ayuda a liberar tensiones acumuladas y nos devuelve al ahora.
El ejercicio regular no solo mejora nuestra salud física, sino que también nos ayuda a gestionar mejor el estrés. Pero atento a esto, tienes que hacerlo de manera consciente, prestando atención a cómo te sientes durante y después de la actividad.
Redefinir tu relación con el trabajo para reducir el estrés laboral
Por último, quiero hablarte de un punto que considero esencial para reducir el estrés laboral: redefinir tu relación con el trabajo. Durante mucho tiempo se nos ha enseñado que el trabajo debe ser una fuente constante de esfuerzo y sacrificio. Pero esto no es sostenible. Puedo asegurarte (por experiencia propia y porque lo he visto con mis pacientes) que el trabajo puede ser una parte importante de nuestra vida sin consumirnos por completo.
Sé que hoy, si no estás bien, pensar en que puedes disfrutar de la vida y no sentirte preso de tu trabajo puede resultar algo loco o imposible -y no estás solo, hay estudios que indican que millones de personas se sienten como tú-. Pero créeme, aprender a poner límites, desconectar y replantearte qué significa el éxito para ti te permitirá disfrutar más de lo que haces sin que esto afecte negativamente a tu bienestar.
Reflexiones finales
Reducir el estrés laboral no es algo que se logre de un día para otro, pero con pequeñas acciones diarias, puedes notar grandes cambios en tu bienestar. Creo que es importante recordarte que tu bienestar no solo impacta en tu salud física y emocional, sino también en la calidad de tu trabajo y en cómo disfrutas de la vida en general, por eso es esencial que pongas manos a la obra si sientes que estás quemado o inmerso en un burnout.
Si te interesa seguir recibiendo consejos y estrategias para gestionar mejor el estrés, te invito a suscribirte a mi newsletter en carloscenalmor.com. Cada día te enviaré un email corto y fácil de leer, con herramientas prácticas que te ayudarán a vivir una vida más tranquila y equilibrada.
Cuídate mucho y disfruta de la vida.